No me da la nota de la EvAU/selectividad, ¿qué opciones tengo?
¡Ante todo mucha calma!
Antes de empezar a contarte las opciones que puedes tener, te vamos a dar un gran consejo: quítate de encima el sentimiento de fracaso. Tómatelo con mucha calma y, como primer paso, trata de analizar qué salió mal: ¿estudias de manera ineficiente? ¿Sufres ansiedad ante los exámenes? ¿Sientes que no tienes bastante tiempo para contestar a todas las preguntas? Estos problemas son todos solucionables. Existen miles de técnicas y especialistas que te pueden ayudar. Como “aperitivo” échale un vistazo a nuestro blog, dónde hablamos de todo ello:
Y sobre todo, ¡míralo desde el enfoque positivo!: es una superoportunidad para explorar otras opciones… Y ¿quién sabe?… ¡igual son hasta mejores! Te suena aquello de las cosas pasan por algo… Pues igual es tu caso, y es una señal del universo 😉
De todas maneras, antes de mover ficha, has de tener en cuenta que el proceso de asignación de plazas es largo y se pueden producir cambios, así que persevera preguntando, no vaya a ser que al final, si puedas entrar. Por otra parte, y sin querer desanimar, las plazas en los estudios más demandados tienden a agotarse en la convocatoria ordinaria, por lo que en la convocatoria extraordinaria habrá menos plazas disponibles.
Pero lo dicho: ve buscando un plan B, porque este también tendrá plazos y te requerirá algún tiempo.
Aquí te planteamos algunas ideas:
- Si realmente ese es el sitio donde quieres entrar, plantéate la posibilidad de presentarte a la siguiente convocatoria… Esto lo puedes hacer tantas veces como quieras, pero vaya… tampoco te tires años porque ya sabes que el mundo laboral es competitivo. De todas maneras, ten en cuenta que en la fase obligatoria siempre se toma en consideración la mejor calificación obtenida, o sea que no prevalece la última. Esto te lo recomendamos solo si tienes un muy buen promedio en Bachillerato y la nota de corte no supera en mucho tu media de EBAU + Bachillerato. Tienes tres opciones para aumentar tu calificación:
- Repetir todos los exámenes de ingreso, tanto la fase obligatoria como la voluntaria.
- Presentarte solo a la fase voluntaria y mantener la calificación de la fase obligatoria.
- Presentarte a la fase obligatoria y mantener la calificación de cada asignatura en la fase voluntaria, que tiene una validez de 2 años. En este caso, deberás realizar los exámenes de todas las asignaturas que componen la fase obligatoria.
Si no lo quieres hacer inmediatamente, no estrés, tienes tiempo. Ya te lo dijimos en otro artículo de nuestro blog: puedes tomarte un año sabático y aprovechar para aprender bien-bien otro idioma, viajar, conocer otras culturas, hacer voluntariado o estudiar algo que no tenga absolutamente nada que ver con lo que has hecho hasta ahora.
- También puedes mirar estudios relacionados que podrían ser una alternativa, y luego conseguir una convalidación… o si no también valorar la opción de universidades “no presenciales” es decir, a distancia (como la UNED) u online. Otra idea es seguir formación no reglada y mejorar tus habilidades profesionales: hay muchas posibilidades en este sentido, como por ejemplo los MOOC, que dan sus clases online y de manera gratuita (desde buenas unis), pero no te dan una titulación homologada u oficial.
- Si te lo puedes permitir, mírate la oferta de universidades privadas: necesitas haber aprobado la selectividad, pero no te piden nota de corte. De hecho, en ellas, puedes inscribirte mucho antes de realizar la EBAU. Aquí lo que igual puede pasar es que, a estas alturas, ya no tengan plazas… pero seguro que si… Pregunta por las becas y las opciones de financiación, porque las tienen.
- Moverte de ciudad: España es un país muy variado y con una oferta académica muy amplia, además de cultura, gastronomía, y muchos otros factores (como el clima o el nivel/calidad de vida) que igual te pueden interesar. En vez de seguir en casa de tus padres, podrás ser independiente desde ya. Nosotros desde Livensa Living, te recomendamos vivamente que elijas una de nuestras resis, para tu nueva vida. Harás muchos amigos nuevos, y te sentirás como en casa, pero muuuucho mejor. Porque la universidad es “un todo”: no solo se trata de estudiar. Es una de las fases más importantes de tu vida, y la que más marcará tu futuro profesional y personal. Así que de nuevo insistimos: dale una buena pensada antes de tomar una decisión. Te recomendamos que le eches un vistazo a nuestro artículo sobre las mejores ciudades universitarias. Si te decantas por esta opción, siempre puedes matricularte allí e intentar cambiarte más adelante. Cuando haces la preinscripción, indicas los estudios que te gustaría realizar en orden de preferencia. Si no logras la calificación y no puedes acceder a tu primera opción, te asignarán la siguiente opción. Es importante que compruebes que la universidad permite el cambio de carrera en el futuro o facilita la convalidación de asignaturas entre diferentes carreras.
- Y si, why not? ¿has considerado alguna vez la opción de la Formación Profesional? La FP ha evolucionado mucho: hay muchos niveles y muchas opciones. Hay de grado superior que ofrecen una buenísima formación con un enfoque eminentemente práctico. Una vez que completes el ciclo, podrás acceder a una carrera universitaria mediante la vía que más te convenga: la Evaluación del Bachillerato para el Acceso a la Universidad (EBAU) o el CFGS. Mucha gente se decanta por la FP incluso para reinventarse, con la FP Dual, que ofrece mayor contenido práctico en el seno de las empresas.
- Trabajar temporalmente en algún sitio hasta que te sientas preparado para tomar una decisión: lo importante es sentirte útil y productivo.
Te deseamos toda la suerte del mundo en esta fase, y te transmitimos mucha calma y tranquilidad para tomar la decisión. Lo que elijas, bien estará.
